Ya hemos abierto cinco cajitas de nuestro calendario y aún no he escrito sobre como lo hicimos.
Me he prodigado poco por el blog estos días pero eso no quiere decir que me haya estado quieta, eso va en contra de mi naturaleza. He estado creando perfiles y páginas en redes sociales y organizando un poco las cosas de mi casita digital. No se que «ventusqui» (me encanta esta palabra que dice una amiga) me ha dado para dar este saltito a que me conozca más gente. Así que el lateral del blog han aparecido unos iconitos para seguirme en Pinterest, Facebook, Twitter y Flickr.
Bueno pero al tema, que me pierdo, todavía no he escrito sobre el calendario porque no consigo tener fotos decentes de él, solo para de noche y con luz artificial y mis cortos conocimientos de fotografía no dan para mucho. Pero como si me descuido nace Jesús antes de ponerlas, ahí van las que tengo. Si consigo unas mejores prometo editar la entrada y cambiarlas.
Después de dar mil vueltas por la red y haberme propuesto no copiar fielmente ninguno, sino intentar ser original (lo que viene a ser no copiar a uno solo sino a muchos), nuestro calendario consiste en un corcho que teníamos por casa de esos en los que se ponen fotos con chinchetas .
Cada uno de los regalitos iría en una cajita y el modelo elegido fue este:
Source: blog.naver.com via Ana on Pinterest
Y los números, estos que ya publique en unos puertos
y ahora nuestra obra de arte
Vaya telita cortar las cajitas, y montarlas te cuento. Del relleno de las cajitas ya conté que era el Belén de Playmobil y chocolates (que se está comiendo mamá porque los niños solo le hacen caso a los muñecos), además hay algunos mensajitos con actividades y pistas para encontrar otros regalitos. Las piezas que no caben en las cajas y un par de cuentos están escondidos por la casa para que los busquen su día correspondiente.
Y después de noches de trabajo, así ha quedado
Y mi compañera Rocío me preguntó: ¿No has usado whasi? como muy incrédula y efectivamente no podía pasar sin whasi, así que el marco del corcho que es azul y no parecía muy navideño, lo he forrado de whasi de estrellitas.
Cada mañana Momo se levanta preguntando ¿abrimos ya la cajita? y eso me compensa por el agobio y el trabajo para acabarlo
Mil besos, mil sonrisas
Ana
Pingback: Crafteando la cuenta atrás | ¿Mi mundo? Los míos
Pingback: Mis puertos de esta semana | ¿Mi mundo? Los míos